No te fíes de este calorcito alentador: nos despista todos los años, como el Corte Inglés: ya es primavera y vienen las alergias. ¡Que nooo! Verás como vuelve el frío. Esto significa que es probable que pasemos mucho más tiempo “hibernando”… y vulnerables al cortejo de virus que revolotean por ahí, esperando un anfitrión tan acogedor como tú.
Asegúrate de seguir estos 10 consejos para evitar las secuelas de este invierno y prepararse para la primavera:
1. Come de manera inteligente
Bueno, esto vale para el invierno, la primavera, el verano… y el otoño, sí. Pero siempre merece la pena repetir que lo que entra en tu cuerpo es lo que va a salir… Así que de pon la “gasolina” adecuada para que estimule tu sistema inmune y protegerlo contra enfermedades como el resfriado, la gripe… y todos sus amigos más o menos malvados.
Recuerda que, si te es posible, el comer en casa, además de resultar mucho más barato (o sano, si fuera sólo comes bocadillos), contribuye a evitar la exposición a «sacos de gérmenes» con forma humana que han llevado su resfriado a trabajar.
2. No dejes que te gane la pereza
Sí, hace frío fuera, pero no dejes que eso te impida mantenerte activo con un buen programa de ejercicios. ¿Sabes que puedes deshacerte de esos kilos de más y ponerte en forma mediante ejercicios de tan sólo 4 minutos diarios?
3. Extermina los repugnantes bichitos que llevas en las manos
En teoría, este consejo es una obviedad… mantener las manos libres de microbios.
SIN EMBARGO la mayoría de la gente piensa que es suficiente con lavarse las manos después de ir al baño (cosa que, por supuesto, es una necesidad, más teniendo en cuenta el número de personas que ni siquiera se lavan las manos en esas circunstancias). Lee el artículo de hace un par de jueves, y verás las veces al día que tus manos se ponen en contacto con objetos realmente contaminados, sin contar con las visitas al baño. No nos damos cuenta, pero las cosas con las que trasteas con normalidad durante todo el día están hasta arriba de microbios.
Y, por cierto, ya sabes que para que el lavado de manos sea efectivo contra virus y bacterias, debes frotarte por lo menos durante 20 segundos para eliminar la contaminación que puede causar resfriados, gripes y mucho más.
4. Mantén limpio el móvil
Esto merece una repetición, porque la mayoría de las personas utiliza sus teléfonos a menudo.
Los estudios han demostrado que los teléfonos móviles suelen estar mucho más sucios que los inodoros.
Piensa en ello. ¿Con qué frecuencia se tocan otras cosas durante el día? Y ¿con qué frecuencia, inmediatamente después, tocas el móvil? Indiscutible: vale la pena desinfectarlo con frecuencia.
5. Respetar y proteger la conexión mente-cuerpo… Vamos, ¡que te relajes!
Demasiado estrés puede dañar el cuerpo y la mente de muchas maneras, si no se maneja correctamente. Y eso incluye el debilitamiento del sistema inmunológico, lo que es tanto como una invitación formal a resfriados, gripes y adláteres.
Busca maneras de reducir el estrés; algunas son muy simples: el yoga, el ejercicio, reír, cantar, y cualquier cosa que te divierta. Es una manera muy inteligente y eficaz para prevenir la gripe y el resfriado.
6. No fumes…
Sí, ya lo sabes, nos lo remachan hasta la saciedad en la cruzada anti-tabaco de nuestra era, pero te lo repito (desgraciadamente tienen razón):
Fumar es un hábito caro, sucio y peligroso que no hace más que daño a tu orgsnismo.
Pero si eres fumador, no hay necesidad de llegar a los parches de nicotina o cualquier otra cara y, posiblemente, perjudicial «cura». En lugar de eso, entérate de las ayudas naturales disponibles para conseguir el mismo objetivo de forma más segura!
7. ¡No toques esa nariz!
El escondite más común para los gérmenes en tu cuerpo, dicen los expertos, son la nariz y los ojos… y la mayoría de las personas nos las frotamos ¡hasta 30 veces al día!
Teniendo en cuenta que es sobre todo un hábito inconsciente, puede ser muy difícil evitarlo por completo, pero por lo menos, sobre todo en situaciones en las que las manos pueden estar contaminadas por gran cantidad de gérmenes, trata de recordar no tocarte la nariz ni los ojos sin lavarte las manos primero.
8. Bebe con moderación
Esta es otra obviedad en la que no vamos a extendernos, ¿verdad? Una cañita está bien, un vinito en la comida es recomendable, pero pasarse con el alcohol (norma en muchas de nuestras reuniones), es algo que debes evitar si quieres proteger tu sistema inmunológico.
9. Mantente hidratado.
Asegúrate de beber abundante agua limpia y fresca, así como de reducir tu consumo diario de cafeína. Esto último puede resultarte impracticable si no duermes lo suficiente… lo que nos lleva a el consejo final, uno de los más importantes:
10. Obtener el mejor sueño… cada noche, siempre
Mantener un horario constante, disminuir el consumo de cafeína y apagar el ordenador y demás artilugios infernales y la televisión por lo menos una hora antes de acostarte te ayudará a obtener el tiempo adecuado de sueño para mantenerte saludable.